En este capítulo del curso de tarot, veremos ¿Qué carta del tarot que representa a piscis?¿Qué carta del tarot soy según mi signo?
La carta que representa a piscis en el tarot es la luna, el arcano de la inteligencia instintiva, del mundo de ensueños, de lo femenino, y de los ciclos vitales.
La carta de la Luna representa una etapa creativa, intuitiva, sensible, el Ying, dinámica, mágica y soñadora, y definitivamente, piscis es ello. Piscis es el signo de agua más sensible y más soñador, está representado por dos peces, que nos indican una dualidad, y es el signo más compasivo, intuitivo, empático y soñador del zodíaco.
En el tarot, la carta de la Luna se relaciona con el inconsciente, y piscis se destaca por esto, por su idealismo, su poderosa imaginación y su espíritu creativo.
Se suele afirmar que los piscianos viven en la luna, porque frecuentemente, les atrae más el mundo abstracto, fantástico, ideal o mágico que el real.
Los piscianos suelen vivir en un mundo de ensueño, son espirituales, mágicos e intuitivos haciendo que este signo sea el más psíquico de todos. Y ellos, confían mucho en su instinto, sensibilidad e intuición.
En la carta de la luna, el agua simboliza el subconsciente emocional con su profundidad, y el crustáceo, cangrejo o langosta que aparece, está en contacto con ella, emerge del agua y alza sus antenas hacia la luna, señalando un camino bien trazado que guía al héroe hasta la luz.
Piscis es como la luna, seductora, mágnetica
Piscis es un signo que maneja los dos mundos, está en contacto con las emociones, pero no está atrapado en ellas, es consciente y se da a la búsqueda de la luz y la conciencia. Esto suele reflejarse por la posesión de las habilidades psíquicas, su creatividad, su sensibilidad y emocionalidad e intuición es 100 por 100 verdad en el caso de Piscianos.
Además, vemos un perro y un lobo que aúllan a la Luna, esto refleja tanto la parte domesticada, como la salvaje, el instinto, dualidad característica de piscis. Lo interesante, es que ambos le aúllan a la luna, lo que nos indica que esta dualidad siempre estará regida por lo emocional.
En el centro de la carta, hay un camino, que nace de lo más primitivo que lleva hacia la consciencia, hacia la ascensión, ilustrado por las montañas del fondo.
Los perros representan los guardianes de nuestro inconsciente, y la luna aquello que quiere emerger, ambos guardan el camino, que es iluminado por la luna.
Por otro lado, la carta de la luna en el tarot representa nuestro lado secreto o el “yo de la sombra”, sugiriendo que las cosas no son como parecen. Y el signo de Piscis gobierna la 12ª Casa de la privacidad, el escape, los secretos, el lado oculto.
Además de ser un signo de agua, Piscis es regido por el planeta Neptuno, quién es conocido como el Dios del Mar.
Y piscis es como el mar, donde los misterios de las profundidades del océano, y el movimiento de las mareas son como sus emociones, reacciones y procesos emocionales.
Finalmente, en la carta podemos encontrar dos torres que enmarcan a la luna, nuevamente aparece la dualidad, dualidad característica de piscis. Dichas torres nos evocan los pilares de la Suma Sacerdotisa, la iniciadora del viaje espiritual de El Loco; esta paridad nos indica la necesidad de comprender las dualidades, de armonizarlas, de no caer en los extremos. Pero cuidado, la fuerza de la luna es avasalladora y el riesgo de dejarse llevar por las emociones acecha a cada paso, desafío que enfrenta piscis.
Las dos torres suelen ser consideradas como pórticos monumentales, que defienden o protegen el espacio interno, en el que se encuentran los animales. Y así es piscis, todo un mundo interno, fantástico y mágico, protegido por grandes torres y los piscianos no suelen dejar entrar a cualquiera.